20.9.09

Kant, conceptos raros y preguntas difíciles

Si el director de la preparatoria donde estudié supiera cómo era la clase de Ética hubiera corrido a la maestra años antes de los que lo hizo.

Me da gusto que se haya enterado tarde que esa no era una clase de ética, era un debate abierto acerca de las ideas de los filósofos más importantes, sin importar si fueran creyentes o ateos, existencialistas, pragmáticos o humanistas.

Y aunque era una de mis clases favoritas siempre me desagradó que los filósofos emplearan expresiones raras para describir cosas sencillas. Y al intentar descifrar uno de esos términos fue que me enamoré del imperativo categórico. No lo explicaré de la misma forma en que Immanuel Kant lo formula, ya que la definición es igual de rara que el término. Simplemente diré que el imperativo categórico al final te lleva a preguntarte, ¿cómo sería el mundo si todos fueran como yo?

Es decir, ¿cómo sería el mundo si todos consumieran/se comportaran/vivieran/pensaran como yo? O bien, podemos profundizar en hábitos cotidianos, positivos y negativos: ¿cómo sería el mundo…
si todos generaran la misma cantidad de basura que yo?
si todos tomaran una ducha diaria de 20 minutos?
si todos emplearan el medio de transporte que yo uso?

Así, démosle una oportunidad a Kant y atrevámonos a responder: ¿cómo sería el mundo si todos fueran como yo?

2 comentarios:

  1. Creo que el imperativo no dice realmente eso... Dice que, para saber si una acción determinada es buena o mala, independiente de que todos seamos diferentes (porque todos somos diferenes, pero todos somos igualmente racionales), debemos decidirlo de la siguiente forma: para saber si algo que quieres hacer está bien o mal, debes imaginarte que todo el mundo hiciera lo mismo (es decir, también que lo hicieran a ti de vuelta). Me puede parecer muy bien emplear 20 minutos en ducharme, pero si los 6000 millones de seres humanos hicieran lo mismo ocurriría una catástrofe. Yo yo no quiero quedarme sin al menos un par de minutos de ducha, o sin agua para beber. De hecho, si puedes desperdiciar ese agua es porque otras personas no tienen acceso a ella. Por tanto, no queremos un mundo en el que todos se duchen 20 min (el interés particular coincide con lo racional universal). Kant diría que a lo mejor lo haces de todas formas, a pesar de todo, pero estaba seguro que, si lo haces, lo haces sabiendo que está mal, porque no puedes superar la "regla de oro".
    No creo que el imperativo categórico sea algo inintelible. Se puede discutir su corrección filosófica, pero: si un niño de cuatro años anda torturando a un gato y el padre le dice "a que no te gustaría que lo hicieran a ti?"... El niño se quedará con cara rara, porque es posible que haya pillado que hay algo contradictorio en lo que hace. Pues bien, la frase del padre recoge completamente todo el significado filosófico del imperativo. Un gran pensamiento.

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  2. y Jesús muchos años antes dijo: "trata a los demas como quieras que te traten a ti..." amen de que los demás no actuen bajo ese principio.

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